Diarios de una bicicleta

Diarios de una bicicleta

Para gente con ganas de salir de casa

Callejeando por Barcelona V

Ayer me enamoré, lo supe desde el primer momento que la vi, la noche estaba bien entrada, daba igual, irradiaba tanta luz y vitalidad que podría haber iluminado a la mismísima luna. En ese mismo instante tuve la certeza que no olvidaría su figura jamás.

No hay comentarios

Con la tecnología de Blogger.